Al norte de la Provincia de Córdoba, emplazado en la localidad de Capilla del Monte, Valle de Punilla, el Cerro Uritorco atrae a turistas de todas las latitudes, no solo por su belleza natural, sino también por el misterio que lo rodea.

Cerro Uritorco, Cerro Macho, Cerro de los loros o Cerro de los Comechingones es sin dudas un lugar donde se conjugan la naturaleza, la energía, el misterio y las leyendas de los pueblos originarios.

Ubicado en el cordón montañoso de las Sierras Chicas de Córdoba, su pico más alto se eleva a 1979 msnm y se lo considera la sexta maravilla natural de la provincia.

El paisaje que ofrece el Cerro Uritorco es de gran atractivo, se impone como una gran mole de laderas abruptas entre los demás cerros que lo rodean, presentando en sus faldeos la vegetación típica de la zona. Durante los atardeceres su aspecto y colores van cambiando a medida que baja el sol, es un espectáculo que obliga al turista a disfrutar y conectarse con la naturaleza.

El ascenso hasta su cima es una actividad recreativa obligada para los turistas más aventureros, aunque el sendero autorizado por la administración del lugar es de relativa facilidad, es bueno estar bien informados antes de emprender la travesía. En la base del Cerro Uritorco, antes de comenzar el ascenso se abona el arancel estipulado y se dejan los datos personales, allí nos brindaran toda la información necesaria.

La distancia a recorrer es de unos 6 km, en un tiempo estimado de 4 hs de subida y 3 hs de bajada.

Es importante contar con calzado adecuado, abrigo, agua y comida liviana.

El paisaje que acompaña durante toda la caminata es bellísimo, al llegar a la cumbre se ve una cruz que marca el punto más alto, con la emoción de haber logrado llegar a la cima estaremos obligados a hacer una pausa y disfrutar de la maravillosa vista panorámica de parte del Valle de Punilla que se presenta ante nosotros. Podremos observar la ciudad de Capilla del Monte, el Dique el Cajón y si el día está bien despejado apreciaremos el Embalse de Cruz del Eje.

Es frecuente ver planear en torno a la cumbre a cóndores y jotes.

La recomendación es conectarse con la energía del cerro, respirar profundo, hidratarse y entonces sí, emprender el regreso…